Cómo descongelar pescado correctamente

Es muy importante que sepas como descongelar el pescado correctamente. Para que no tengas problemas, te vamos a compartir algunos trucos y consejos muy prácticos. Debes tener en cuenta no romper su cadena de frío, con el fin de conservar el producto con sus máximas propiedades.

Descongelar el pescado puede no tener mucha ciencia, pero sí es necesario que no cometas errores, ya que podría ser perjudicial para la salud de tu familia.

Formas de descongelar el pescado correctamente

Descongelar el pescado correctamente te permite consumirlo de forma segura. Para ello, es preciso que no rompas su cadena de frío, que le permite mantener su calidad y, así, evitar la contaminación por microorganismos y bacterias.

Existen muchas maneras de descongelar el pescado, aunque lo que menos se recomienda es dejarlo a temperatura ambiente. En este caso, corres el riesgo de no controlar los tiempos y favorecer el mal estado del mismo, que puede terminar siendo un riesgo para la salud.

Por eso, te vamos a indicar los métodos más seguros, para que tengas la convicción de que va a estar en buenas condiciones. Lo primero que debes hacer es comprar pescado online de la mejor calidad. Solo de esta forma te asegurarás de tener un producto saludable y con la mayor garantía.

Descongelar el pescado rápido

Si eres una persona con mucha prisa o a última hora han llegado esas visitas inesperadas, te vendrá bien saber cómo descongelar pescado rápidamente.

Este método rápido te ayudará a ganar minutos e, incluso, alguna hora muy valiosa. Si se conserva el pescado congelado, llena un recipiente con agua fría. Al introducir el pescado en agua fría, consigues que el método de descongelación se acelere, sobre todo si ya has dejado varias horas que el proceso avance dentro de tu frigorífico.

Otro truco que puedes hacer es meter el pescado congelado en una bolsa de plástico, siempre que ya hayas dejado que se vaya descongelando en la nevera toda la noche. Si aún no se ha conseguido el objetivo, pásalo por el chorro de agua fría, sin quitarle la bolsa. Seguramente empiezas a notar como se va ablandando a medida que se va mojando.

Descongelar en el horno

En caso de que te decidas por usar el horno, será mejor que te plantees cocinar el pescado descongelado de una vez. No solo te será más sencillo, sino que te ahorrarás preocupaciones y estar vigilándolo. De esta forma podrás convencerte de comerlo de forma segura.

Sin duda, es uno de los trucos de cocina que más usan los chefs. Obviamente, no todos los tipos de pescados o guisados aceptan este método, pero lo debes tener en cuenta a la hora de comprar pescado congelado.

Te recomendamos que observes la fecha de congelación, con tal de no superarse el límite para su consumo. Si te gusta prevenir la comida a largo plazo, deberás cuidar que se conserve siempre a la temperatura indicada hasta el momento en el que lo decidas cocinar.

Descongelar el pescado en el microondas

El microondas suele ser una manera muy usada para descongelarlo. El riesgo es que se comience a cocinar el pescado, cuando ese no es tu deseo. También cabe la posibilidad de que se pierdan muchas propiedades del mismo e, incluso, notes que su textura ha cambiado.

Otro detalle fundamental que debes tener en cuenta es que no todos los microondas responden de la misma manera al pulsar el botón de descongelación que presentan en su programación.

Por lo anterior, te recomendamos que si te decides por este método, vigiles todo el proceso, para evitar que comience a cocinarse, en caso de que no sea tu plan. Cada modelo de microondas te ofrece un distinto funcionamiento en este sentido.

La importancia de descongelar bien el pescado

Debes tener precaución a la hora de llevar a cabo un truco para descongelar el pescado. Si no lo realizas de la forma recomendada, su consumo puede suponer un riesgo para tu salud. Así, hay que prestar especial atención al marisco congelado, teniendo en cuenta las fechas de envase, sobre todo la caducidad, que aparecen en las instrucciones de consumo.

Evita deshacer la congelación ayudándote de agua caliente. Mejor te puede funcionar el vapor, siempre que decidas continuar el proceso de cocción. Además, de esta forma, consigues mantener el sabor del pescado y, por supuesto, la mayor parte de sus propiedades.

Debido a los procesos de conservación del pescado, que se llevan a cabo en el momento de su captura, te recomendamos que no lo congeles por tu cuenta. Romper con la cadena de frío, descongelando y volviendo a congelar, supone un cambios drástico en la temperatura, que puede alterar su calidad de manera evidente.

Así que, si has pensado cocinar la pieza de pescado inmediatamente, lo mejor será que la compres fresca. Para largo plazo, siempre puedes optar por el pescado congelado. Solo ten presente los trucos que te hemos descrito, con el fin de mantener la buena salud de tu familia.

Existen una serie de síntomas, fácilmente reconocibles, producto de haber comido pescado en mal estado. Cuando esto ocurre, los microorganismos que se hayan generado pasan a nuestro sistema digestivo, produciéndonos una intoxicación que se exterioriza a través de la diarrea, dolor abdominal, náuseas, vómitos, debilidad muscular, fatiga y fiebre.

Por otro lado, hay que saber distinguir las reacciones anteriores de una posible reacción alérgica causada por consumir pescado. Esta puede ocasionar inflamación, enrojecimiento en la piel, ampollas y fiebre muy alta. Estos síntomas también pueden confundirse por una infección causada por la bacteria Vibrio vulnificus. Esta prolifera en pescados de agua cálida.

Aunque con la pronta atención médica puedes revertir las situaciones anteriores, no verás nada mejor como la adecuada prevención, que consigues al realizar la descongelación del pescado como ya te indicamos anteriormente.

Ahora que ya sabes cómo descongelar el pescado, llevando a cabo los trucos que presentamos, a través del reposo en la nevera o con la ayuda del microondas, podrás comer más saludable, sin renunciar a las propiedades de una de las proteínas más importantes de la dieta mediterránea.